La otra noche lo había llamado ya un par de veces y nada. Finalmente en medio del desespero le dije: "Lucas, deja ya el p..... pinche iPad y ven." Y vino.
Supongo que cenamos, o algo importante. Ahora no me acuerdo para qué lo llamaba (aunque en ese momento me acordaba, claro).
Después de un rato estaba Matías con el iPad viendo cualquier cosa, o solo teniéndolo para que no lo tuviera su hermano. Y de repente Lucas le suelta: "Matías, deja el pinche iPad ya."
Cosas que decimos. Cosas que nos dicen de vuelta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario